¿Cuánto Cuesta Desarrollar una App Personalizada?
Desarrollo Web
18 dic 2025
Costes reales para crear una app en España: desde 8.000 € a 275.000+, con factores clave como complejidad, plataforma, equipo, MVP y mantenimiento.
Desarrollar una app personalizada puede costar desde 8.000 € hasta más de 70.000 €, dependiendo de su complejidad, funcionalidades y equipo de desarrollo. Por ejemplo:
Apps sencillas: 8.000–15.000 €, ideales para MVPs, con desarrollo en 2–6 meses.
Apps de complejidad media: 15.000–30.000 €, incluyen integraciones como pagos y notificaciones, con desarrollo en 3–6 meses.
Apps complejas: 30.000–70.000 € o más, con funciones avanzadas como IA o geolocalización, y desarrollo en 6–12 meses.
El precio también depende de las tarifas de los desarrolladores (40–70 €/hora en España) y de factores como el diseño, backend y mantenimiento (15–25 % del coste inicial al año). Para optimizar recursos, se recomienda empezar con un MVP y escalar según las necesidades del mercado.
Invertir en planificación y elegir el socio adecuado puede marcar la diferencia en el éxito de tu proyecto.
Costes de desarrollo de apps según complejidad en España 2024
¿Cuánto Cuesta Desarrollar una App en 2025?
Costes de desarrollo de apps en España: qué esperar
El mercado español de desarrollo de apps no para de crecer. Según las previsiones, este sector alcanzará un volumen de negocio de 4.450 millones de euros para 2029, con una tasa de crecimiento anual del 8,65%. Además, con más del 90% de la población española utilizando smartphones, España se presenta como un entorno ideal para el desarrollo de aplicaciones móviles.
Sin embargo, los costes de desarrollo en España reflejan la madurez de este mercado. Las tarifas suelen ser más altas en comparación con otros países, especialmente en ciudades como Barcelona y Madrid, que se han convertido en centros clave para startups tecnológicas. A continuación, analizamos los costes estimados y los factores que influyen en ellos.
Rangos de coste según la complejidad de la app
El coste de desarrollar una app depende en gran medida de su nivel de complejidad. Aquí tienes una idea general de los precios según el tipo de proyecto:
Apps sencillas (8.000–15.000 €): Estas aplicaciones incluyen características básicas como formularios de registro, perfiles de usuario simples, contenido estático y un diseño funcional pero sin grandes pretensiones. Son ideales para MVPs o proyectos de menor alcance. El desarrollo puede tardar entre 2 y 6 meses.
Apps de complejidad media (15.000–30.000 €): Incorporan integraciones con APIs externas, notificaciones push, pasarelas de pago y diseños más personalizados. Este tipo de proyectos suele necesitar entre 3 y 6 meses de desarrollo.
Apps complejas (30.000–70.000+ €): Aquí hablamos de aplicaciones con características avanzadas, como procesamiento de datos en tiempo real, inteligencia artificial, geolocalización avanzada, arquitecturas backend sólidas y cumplimiento de normativas como el GDPR. El desarrollo puede extenderse de 6 a 12 meses o más.
Tarifas por hora y duración del proyecto
El coste total de una app también está relacionado con las horas de trabajo necesarias y las tarifas por hora de los desarrolladores.
Fórmula básica:
Coste total = Horas de desarrollo × Tarifa por hora.
En España, las tarifas horarias de los desarrolladores suelen situarse entre 40 y 70 € por hora. Por ejemplo, una app sencilla que requiera unas 200 horas de trabajo con una tarifa media de 50 €/hora costaría alrededor de 10.000 €. En cambio, una app más compleja que necesite 800 horas podría alcanzar los 40.000 €. Si el proyecto requiere un desarrollo más rápido y se necesita un equipo más grande, los costes pueden aumentar significativamente.
Además, el cumplimiento del GDPR supone un gasto adicional para las apps que manejan datos sensibles. Esto implica no solo codificación extra, sino también auditorías y revisiones legales, algo especialmente importante para sectores como la salud, las finanzas o el comercio electrónico.
Principales factores de coste y cómo controlarlos
Saber qué elementos influyen en el coste de desarrollar una app es clave para gestionar el presupuesto de manera eficiente. Los principales factores que afectan al precio son la complejidad de la app, la plataforma elegida, las necesidades de backend y el tipo de equipo de desarrollo. Entender estos aspectos no solo te ayudará a optimizar tu inversión, sino también a mantener un nivel de calidad adecuado. Vamos a desglosar cada uno de ellos para que puedas tomar decisiones informadas.
Complejidad de la app y selección de funcionalidades
El alcance y las funcionalidades de tu app tienen un impacto directo en el presupuesto. Funciones básicas como el registro de usuarios, perfiles o contenido estático son más económicas de desarrollar que opciones más avanzadas como inteligencia artificial, procesamiento en tiempo real o sistemas de geolocalización complejos.
Un enfoque práctico para controlar estos costes es desarrollar un MVP (Producto Mínimo Viable). Este tipo de app incluye únicamente las funcionalidades esenciales, permitiéndote probar tu idea en el mercado y recopilar opiniones de usuarios antes de invertir en características más complejas.
Elección de plataforma: iOS, Android o ambas
El desarrollo para una única plataforma, ya sea iOS o Android, suele ser más asequible que crear aplicaciones nativas para ambas. Esto se debe a que las apps nativas requieren desarrollos separados para cada sistema operativo, lo que incrementa tanto el tiempo como los costes.
Si buscas reducir gastos, considera usar frameworks multiplataforma como React Native o Flutter, que permiten desarrollar una sola base de código para ambas plataformas. También, para startups con presupuestos ajustados, lanzar primero en la plataforma más utilizada por tu público objetivo o incluso optar por una aplicación web progresiva (PWA) puede ser una solución inteligente para validar tu idea de negocio.
Necesidades de backend y arquitectura del sistema
El backend es uno de los aspectos que más puede encarecer el desarrollo de una app. Este componente gestiona la lógica del negocio, el almacenamiento de datos, la seguridad y las integraciones con servicios externos. Funcionalidades como actualizaciones en tiempo real, procesamiento de pagos o sistemas de inteligencia artificial aumentan la complejidad y, en consecuencia, el coste.
Para minimizar estos gastos, utiliza soluciones ya existentes como APIs de terceros para funciones estándar (por ejemplo, pasarelas de pago o inicio de sesión con redes sociales) en lugar de desarrollarlas desde cero. Además, recurrir a servicios en la nube como AWS, Google Cloud o Microsoft Azure puede ser más económico a medida que tu app crece. Diseñar una arquitectura escalable desde el principio te ayudará a evitar costosas reestructuraciones en el futuro.
Opciones de equipo de desarrollo
El equipo que elijas para desarrollar tu app influirá directamente en el coste y en el resultado final. Freelancers suelen ser una opción más económica, pero pueden tener limitaciones en cuanto a disponibilidad y especialización. Por otro lado, las agencias pequeñas o medianas ofrecen equipos con más experiencia y diversas habilidades, lo que se traduce en un mayor soporte y calidad.
Al seleccionar un proveedor, considera aspectos como su experiencia en proyectos similares, la calidad de su portafolio, su capacidad de comunicación y su conocimiento sobre normativas locales, como el GDPR. Aunque un equipo más experimentado pueda parecer una inversión inicial mayor, puede ahorrarte problemas a largo plazo, evitando errores costosos y retrasos en el desarrollo.
Cómo se distribuyen los presupuestos de apps en startups
Cuando hablamos de costes en el desarrollo de apps, entender cómo se reparte el presupuesto es clave para planificar correctamente la inversión y anticipar posibles imprevistos. En términos generales, el presupuesto se divide en dos grandes bloques: los costes únicos necesarios para lanzar la app y los costes recurrentes asociados a su mantenimiento a lo largo del tiempo.
Distribución estándar de costes
El proceso de desarrollo de una app incluye varias etapas, cada una con su propia asignación presupuestaria. Por ejemplo, la fase inicial de descubrimiento y estrategia, que abarca la validación de la idea, el análisis de mercado y la definición de requisitos, suele consumir entre un 10 % y un 15 % del presupuesto total.
El diseño UX/UI es otra área que requiere una inversión significativa. Aquí se incluyen la creación de wireframes, prototipos y el diseño visual final. Sin embargo, la mayor parte del presupuesto se destina al desarrollo técnico, tanto del frontend como del backend. La última etapa, que incluye las pruebas y el despliegue, asegura que la app esté lista para su lanzamiento sin errores ni problemas técnicos.
Mientras estos gastos iniciales son imprescindibles para el lanzamiento, los costes recurrentes se enfocan en mantener la app operativa y actualizada.
Costes únicos frente a costes recurrentes
Costes únicos: Estos corresponden a todos los gastos necesarios para desarrollar y lanzar la app. Algunos ejemplos incluyen:
Validación de la idea: entre 1.000 € y 5.000 €
Diseño UX/UI: entre 5.000 € y 20.000 €
Desarrollo técnico: entre 10.000 € y 50.000 € o más
Pruebas: entre 3.000 € y 10.000 €
Costes recurrentes: Una vez lanzada, mantener la app activa implica gastos continuos. El mantenimiento anual, por ejemplo, representa entre un 15 % y un 25 % del coste inicial de desarrollo. Si la inversión inicial fue de 100.000 €, el mantenimiento anual estaría entre 15.000 € y 25.000 €. Otros costes recurrentes incluyen:
Hosting e infraestructura: entre 100 € y 1.000 € mensuales.
Tarifas de tiendas de aplicaciones: 99 € al año para Apple App Store y un pago único de 25 € para Google Play Store.
Además, no olvides los gastos relacionados con actualizaciones de seguridad, corrección de errores y la incorporación de nuevas funcionalidades para adaptar la app a las necesidades cambiantes del mercado. Estos factores son esenciales para garantizar que la app siga siendo relevante y funcional con el tiempo.
Ejemplos de presupuesto según las necesidades de cada startup
A partir de los factores de coste analizados, aquí te mostramos tres escenarios prácticos que reflejan diferentes necesidades y objetivos para startups:
3 escenarios de presupuesto según el alcance del proyecto
MVP básico (27.500 € – 50.000 €): Diseñado para validar una idea inicial. Este tipo de proyecto suele incluir entre 3 y 5 pantallas, autenticación de usuarios, una base de datos sencilla y un diseño funcional pero sencillo. Se desarrolla frecuentemente con frameworks multiplataforma, lo que permite lanzar la app tanto en iOS como en Android usando un único código base. Es perfecto para quienes buscan lanzar rápido y probar su idea en el mercado sin comprometer grandes recursos.
App empresarial estándar (50.000 € – 100.000 €): Pensada para negocios que necesitan una app con más funcionalidades y un diseño cuidado. Aquí se incluyen integraciones con APIs (como pagos, notificaciones o analíticas), un backend más robusto, diseño UX/UI personalizado y pruebas exhaustivas antes del lanzamiento. Este tipo de apps es común en sectores como comercio electrónico, gestión de clientes o plataformas de servicios donde se requiere una buena base de escalabilidad desde el principio.
Producto complejo y escalable (100.000 € – 275.000 € o más): Ideal para startups con grandes ambiciones de crecimiento. Este tipo de proyecto incluye arquitecturas avanzadas como microservicios, integraciones complejas, funcionalidades en tiempo real, sistemas administrativos completos y seguridad avanzada. Además, puede desarrollarse de forma nativa para cada plataforma. Es la opción adecuada cuando la app es el centro del modelo de negocio y se espera un volumen considerable de usuarios desde el lanzamiento.
Construir por fases
Más allá de establecer un presupuesto inicial, dividir el desarrollo en fases puede ser una estrategia inteligente para maximizar los recursos. Comienza con un MVP que permita validar la propuesta de valor con usuarios reales. Esto no solo te ayudará a recopilar datos sobre qué funcionalidades son realmente necesarias, sino que también reducirá el riesgo de invertir en características que podrían no ser útiles.
Cuando el MVP demuestra tracción, puedes destinar más presupuesto para ampliar su alcance: añadir nuevas funcionalidades, mejorar el diseño visual o incluso expandir a otras plataformas. Este enfoque iterativo no solo optimiza los recursos, sino que también acelera el tiempo de llegada al mercado. Además, te permite ajustar el desarrollo en función de la respuesta de los usuarios y planificar mejor los costes de mantenimiento necesarios para que la app siga operativa a largo plazo.
Costes continuos y mantenimiento para startups españolas
Cuando se trata de planificar los costes para tu startup, no basta con pensar en el desarrollo inicial de una app. El mantenimiento continuo es clave para garantizar que tu aplicación siga funcionando correctamente, sea segura y esté al día con las actualizaciones de iOS y Android. Sin un plan para mantenerla, la inversión inicial pierde valor con el tiempo.
Gastos típicos de mantenimiento
El mantenimiento de una app no es opcional, y las empresas deben reservar entre un 15 % y un 20 % del coste inicial de desarrollo cada año para cubrirlo. Esto incluye tareas como corregir errores, implementar actualizaciones de seguridad, garantizar la compatibilidad con nuevas versiones de los sistemas operativos y realizar mejoras basadas en la opinión de los usuarios. Por ejemplo, si el desarrollo de tu app costó 30.000 €, deberías destinar entre 4.500 € y 6.000 € anuales para su mantenimiento. Dependiendo de la complejidad de la app, estos costes pueden variar entre 5.000 € y 30.000 € al año.
Prevenir problemas de rendimiento y seguridad
Descuidar el mantenimiento puede salir caro. Reparar problemas de emergencia suele costar entre 3 y 5 veces más que un mantenimiento planificado. Además, la falta de actualizaciones puede tener consecuencias serias: Google eliminó 1,1 millones de apps de Play Store en un solo trimestre por este motivo.
La seguridad es aún más importante si tu app gestiona datos sensibles, como información personal, pagos o datos de salud. Cumplir con normativas como el RGPD requiere un esfuerzo constante, y no hacerlo puede resultar en multas importantes. Contar con planes de monitorización y soporte proactivo te permitirá identificar problemas antes de que afecten a los usuarios y asegurar la confianza en tu producto a largo plazo.
Conclusión: Planifica el presupuesto de tu app personalizada en España
Desarrollar una app personalizada en España puede implicar costos muy variados, dependiendo de factores como la complejidad del proyecto, las funcionalidades requeridas, la plataforma elegida y el equipo de desarrollo. Sin una planificación adecuada, el presupuesto puede desbordarse y el resultado final podría no cumplir con tus expectativas.
Para optimizar recursos, lo más inteligente es centrarse en lo esencial. Comenzar con un MVP (Producto Mínimo Viable) te permite validar tu idea rápidamente, recopilar opiniones reales de los usuarios y evitar gastos innecesarios en funcionalidades avanzadas desde el principio. Definir claramente el alcance del proyecto es clave: prioriza lo que realmente necesita tu app, descarta características que no sean imprescindibles y considera opciones como el desarrollo multiplataforma o la integración de APIs de terceros para mantener los costos bajo control sin sacrificar la calidad. Este enfoque paso a paso no solo minimiza riesgos iniciales, sino que también facilita ajustes basados en la respuesta del mercado.
No olvides que el presupuesto no termina con el lanzamiento. El mantenimiento y la seguridad son aspectos cruciales que deben estar contemplados desde el principio. Diseñar una app con capacidad de escalar desde sus primeras etapas puede evitar costosas reestructuraciones en el futuro.
Por último, elegir al socio adecuado para el desarrollo de tu app puede marcar una gran diferencia. Trabajar con empresas como Niom Solutions, que ofrece metodologías ágiles y soporte continuo, puede ayudarte a maximizar tu inversión. Con su experiencia, es posible lanzar tu app en menos de 12 semanas, asegurando un proyecto eficiente y alineado con tus objetivos.
Con una planificación detallada y el aliado correcto, puedes desarrollar una app personalizada que no solo respete tu presupuesto, sino que también cumpla con tus metas empresariales.
FAQs
¿Es recomendable empezar con un MVP para mi app personalizada?
Si estás pensando en desarrollar una app a medida, comenzar con un MVP (Producto Mínimo Viable) puede ser una estrategia muy efectiva. Un MVP consiste en lanzar una versión básica pero completamente funcional de tu app, diseñada para probar tu idea en el mercado sin necesidad de realizar una gran inversión desde el principio.
Este enfoque resulta especialmente práctico para minimizar riesgos, obtener feedback directo de usuarios reales y ajustar el desarrollo según las necesidades que vayan surgiendo. También te permite centrarte en las funciones más importantes y aprovechar mejor los recursos disponibles, algo fundamental para startups con presupuestos limitados o que buscan crecer de manera eficiente.
¿Qué aspectos debo evaluar para decidir entre desarrollo nativo y multiplataforma?
Para tomar esta decisión, es importante tener en cuenta varios factores clave. El rendimiento y la experiencia del usuario suelen ser mejores en aplicaciones nativas, ya que están creadas específicamente para cada plataforma, como iOS o Android. Sin embargo, este enfoque puede implicar un mayor coste y más tiempo de desarrollo. En contraste, las soluciones multiplataforma permiten trabajar con una única base de código para ambas plataformas, lo que puede reducir gastos y acelerar el lanzamiento. Eso sí, podrían surgir limitaciones al implementar funcionalidades más avanzadas.
Además, es esencial evaluar la complejidad de las funcionalidades que se desean incorporar, el diseño de la interfaz (UI/UX), la infraestructura backend y las integraciones necesarias con servicios externos. Por último, asegúrate de contar con un equipo de desarrollo que tenga experiencia en la tecnología que mejor se ajuste a tus metas y presupuesto.
¿Cómo puedo controlar los costes de mantenimiento de una app a largo plazo?
Para mantener bajo control los costes de mantenimiento de una app a largo plazo, es clave establecer un presupuesto anual que ronde entre el 10 % y el 20 % del coste inicial de desarrollo. Este presupuesto debería incluir aspectos como actualizaciones, refuerzos de seguridad, soporte técnico y ajustes necesarios para que la app sea compatible con las nuevas versiones de sistemas operativos.
También es importante dar prioridad a actualizaciones regulares para evitar que se acumulen problemas técnicos. Además, contar con una estrategia de seguridad bien definida ayuda a reducir riesgos y prevenir gastos inesperados. Una gestión cuidadosa no solo optimiza los costes, sino que garantiza que tu app se mantenga operativa y competitiva en el mercado.